He vuelto a Cabo Ortegal. Hay lugares, unos pocos, a los cuales necesito volver de vez en cuando. Y a la vista de estas fotografías sobran las palabras para explicar mis motivos.
Y el regreso me ha dado una alegría inesperada, la de ver cómo se ha arreglado el entorno del faro: la carretera está mejor, con una acera vallada para los paseantes. Y han acondicionado una zona muy cómoda para los coches en la parte izquierda que además los oculta de la vista de quien se aproxima al faro.
Y el faro… el faro brillaba con luz propia. No sé si era el contraste con el mar, el resplandor del sol o que estaba recién pintado, ¡pero ese día lo vi hermosísimo!
Y haces bien en volver… ¡Cuanta envidia!…
Pues anímate y vuelve!!! Un abrazo grande, Jose María.
Por las fotos parece que jamas hubiera estado allí, estuve en 2008 y NO lo recuerdo así, serán los años…
Ja ja, qué va, Lulo, recuerdas bien, yo estuve allí hace 8 meses y no estaba así, lo arreglaron hace bien poco, saluditos!!
La verdad es que está cambiado desde la última vez que fui…precisamente contigo
¿A que sí? ¡Y recuerda que tenemos pendiente Estaca de Bares!